Muchos carteles de festivales del 2015 tuvieron como cabeza de cartel a viejas glorias a las que se podría aplicar esta canción. Lo que no dice nada bueno del momento del rock. Todas ellas deberían estar como dice la canción, out of time y sin embargo son las que llevan las letras más grandes. La esperanza del negocio musical dicen que está en las manos de Jay-Z o Kayne West. Y mientras los treintañeros se meten electrónica con efectos a los quinceañeros se les machaca con el pop amaestrado del momento. Y pienso que quién está out of time soy yo mismo.
Más aún si me empeño en reivindicar a estos Rolling en plena época Jones, la que se cerró antes de los 70. La mejor época de estos dinosaurios para los que se rumorea siempre la última gira, cansados de no sacar ningún gran tema desde hace treinta años. Ni falta que hace, solo ellos están a la altura de los Beatles. Y no precisamente por ese sonido particular que empastaron cuando se quedaron solos Jagger y Richards, sino por lo que hicieron en sus primeros años, no por las composiciones que seguian a cargo de la pareja stone, sino por los arreglos y la personaldiad, mucho más rica que les añadía el descerebrado de Jones. De él es el vibráfono que marcó la primera versión, la que apareció en el Aftermath americano y fue single en los USA, la chulería de la letra es Jagger al 100%, «You thought you were a clever girl/ Giving up your social whirl/ But you can’t come back and be the first in line, oh no/ You’re obsolete my baby». El silencioso Wyman es protagonista como pocas veces y está el marcapasos guitarrero de Richards, pero hay unos puentes delicados que solo podían provenir de un Jones cada vez más empeñado en dotar de color a las canciones.
