Después de Los Enemigos, Josele recaló durante una buena temporada en Santiago, en Galicia siempre se ha sentido como en casa. Junto a Pablo Novoa, un vigués sin remedio, que había colaborado ya con los madrileños en su directo de despedida «Obras Escocidas» y que venía de Golpes Bajos y La Marabunta grabó para la Virgin en el 2006 «Garabatos» , donde estaba este relajante y vacilón Baile de los peces.
Que Josele es de los mejores letristas del rock español es sabido. La ironía y el cachondeo de «Tengo una novia», el surrealismo de «John Wayne», la rabiosa «Septiembre» o la retranca extrasensorial de «Real» andan por ahí. Con Pablo Novoa se lanzó a otros palos musicales, a otra manera de producir los discos. Apareció el mismo cantante inconfundible, y un poeta más grande, quizás más relajado. Tan relajado como para cantarle a los peces de la pecera mientras suelta versos como; «Ya saben que no soy lo que parezco/ si no nunca vendrian hasta aqui/ hago como que pesco/ eso los mantiene frescos/ y nadie puede sospechar de mí » mientras la guitarra de Novoa juguetea por ahi. Como el mismo dijo en una entrevista a Henrique Mariño, otra manera de interactuar con la música y los músicos, más amplia y lejos de la precisión y la contundencia que buscaba con los Enemigos. Una contundencia que ha vuelto a buscar en el disco que ahora mismo está editando y del que se puede escuchar este adelanto (https://www.youtube.com/watch?v=a2NZ7VBtwCQ) . La raspa ha vuelto y parece que esta vez viene de Bueu.
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