Un clasicazo. Dice la leyenda que el verdadero icono estético del punk fue este Richard Hell que a mediados de los 70 hablaba en los conciertos neoyorquinos de la Blank Generation. Los años en los que todo cabía en el CBGB, los años que Malcom Mclaren se llevó a Londres para montar Sex la tienda de ropa donde se gestó el penúltimo pelotazo del pop, los Sex Pistols. El compañero de pupitre de Tom Verlaine fue el primero que llevó camisetas rotas y el primero que utilizo el imperdible para autolesionarse y dar algo de color.
No querer tocar Blank Generation fue el final de Television y el de una amistad que duraba desde la primaria. Tom Verlaine, más tranquilo al fin, se encerró con Lloyd durante un año para esculpìr el Marquee Moon. Hell más poeta que músico se juntó con Johnny Thunders y Jerry Nolan, dos supervivientes de New York Dolls para hacer The Heartbreakers y poder cantarla siempre que quisiera. Para hacerla se basó en The Beat Generation, un tema de 1959 y en su Blank se apoyaron los Pistols para hacer Pretty Vacant. «Triangles were fallin at the window as the doctor cursed/ He was a cartoon long forsaken by the public eye/ The nurse adjusted her garters as I breathed my first/ The doctor grabbed my throat and yelled, «God’s consolation prize!»/ I belong to the blank generation and/ I can take it or leave it each time». Sólo llegó a publicar dos discos con los Voidoids y uno en solitario pero su literaria sombra se extendió por todo el movimiento.