Una canción para empezar la primavera. Para fantasear y soñar despierto. John Sebastian y sus Lovin´ Spoonful fueron los mejores de la Costa Oeste en eso de las flores y el amor. Los más hippies de los hippies. Con un nombre como «Cucharada Amorosa» la cosa estaba clara. Claro que esa cucharada daba lugar a muy malos pensamientos y las letras del grupo californiano (aunque empezaron en el Greenwich folkie neoyorqiuno) siempre fueron miradas con lupa por aquello de la marihuana y el LSD. Ya sabéis, lo del hombre de los caramelos y caramelitos como este «Daydream», que debajo de la inocencia escondían la «mardá»-
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| Sebastian, sus patillas y los colegas |
«What a day for a day dream, What a day for a day dreamin’ boy. And I’m lost in a day dream, Dreamin’ ‘bout my bundle of joy». La canción se mantiene solo con una guitarra que podría ser un ukelele, y ya te ves paseando por la calle un día de primavera, el violín se confunde a veces con el silbido «I’m blowing the day to take a walk in the sun, And fall on my face in somebody’s new mowed lawn«. Suena optimista y todo es soñar despierto pero cuidado, que los Lovin´te advierten de que no te quedes ahi colgado toda la vida, «And you can be sure that if you’re feelin right A day dream will last a long time into the night. Tomorrow at breakfast you may prick up your ears, Or you may be dreamin’ for a thousand years«. Pues a mí me parece que lo que hacen es avisar… Además está bien empezar la primavera silbando como los Lovin´…
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