Este si que suena viejuno, es del 72. Cuando llegó a mis manos ya conocía bastante de rock´n´roll, supongo que como tantas cosas sería Madrid del 77. Este tipo hacia letras muy líricas pero cercanas, tenía algo de Serrat profundamente castellano. Como él, había salido de un movimiento paralelo a la nova canço catalana, el Movimiento de Canción Popular, con gente como Elisa Serna o Adolfo Cedrán, allá por lo sesentas. No se encontraba a gusto encerrado en lo folklórico y tras darse una vuelta de un año por Europa decide comenzar con algo más cercano al blues, al rock, o al jazz.
Quien se iba a resistir en aquellos años en los que casi todo era nuevo a un recitado blues tan naturalista, casi parecía un Ginsberg sin metáforas, el Ginsberg que utilizaría en El Peso del Mundo Es Amor del siguiente disco. Su entrada músico-sentimental «hoy como siempre se olvidaron de citar/ al amigo perdido hace unos días/ hoy como siempre no se olvidan de citar/ los líos de Irlanda y Argentina». La rutina, descrita con todo detalle, los chismes y el puente en segunda persona, .. «y un día quizás sientas que te ahoga la vergüenza/ y salgas a gritarlo por las calles», No sé porqué ahora me suena ese trozo a como cantaba Miguel Ríos, cuando era Mike y en su vuelta, para la que faltaban un par de años. Hilario Camacho, buen cantante, como el mismo confesaba estaba inseguro de su técnica y supo acompañarse de buenos músicos, el guitarrista Jean-Pierre Tortois y sobre todo el buen productor Alain Milhaud, que se lo llevó a grabar a Londres este A Pesar de Todo. Al final, como una pequeña paradoja, Hilario Camacho pegó un pelotazo con Tristeza de Amor, banda sonora de una serie del 86 la que me acuerdo muy vagamente y otro oculto con las canciones de David el Gnomo. En el 2002, una buena Madrid Amanece, pero nada era ya igual. Decidió marcharse en el 2006 con una carta de despedida. Muchos nos acordamos de él como algo que pertenecía a un momento. Por eso me sé de memoria muchas de sus canciones… aunque lleve años sin oirlas.
