Come Back to NY. Las peleas de Richard Hell y Tom Verlaine, amigos desde su infancia en Delaware por el control del grupo acabaron con el primero en Richard Hell & the Voidoids y el segundo como líder y compositor de Television. La ruptura tuvo como escenario un sitio mítico, prácticamente el club residente de los Television, ni más ni menos que el CBGB, (Country Blue Grass Blues), ahora acabado y cerrado. La excusa era lo que se movía Hell en el escenario, la realidad la distinta perspectiva de la música, Hell más por la actitud, Verlaine más por el pentagrama. En Marquee Moon están TV, el no menos importante Richard Lloyd a la otra guitarra y la sección rítmica adecuada, Fred Smith al bajo y Billy Ficca a la batería.

Prácticamente solo un disco, básico para saber cómo se ve la psicodelia desde el punk, y por donde iban a ir los tiros una vez desaparecida la espuma. Guiados por Quicksilver, Love, y otros guitarristas garajeros de los 70, sin olvidarse de la Velvet Underground. Los dos guitarras  se repartían los papeles de solista y rítmica, dejando claro en los créditos de quién era cada solo (en esta canción de Lloyd). Cada guitarra en su canal cuando se precisa, este disco es para escuchar a un alto volumen. La grabación y la preparación duró dos años en los que pulieron este rompecabezas de guitarras. Esta es de las canciones más básicas del disco, de estructura sencilla y casi hasta rockera. Un riff repetido, una letra simple «What I want/ I want now/ And it’s a whole lot more/ Than ‘anyhow’/ I want to fly/ Fly a fountain/ I want to jump jump jump/ Jump a mountain«, un estribillo machacón donde se luce Billy Ficca, «I understand all, I see no/ Destructive urges, I see no/ It seems so perfect, I see no/ I see, I see no, I see no evil» y un perfecto solo medido, justo en el centro de la canción, rápido y urgente. Un soplo de aire fresco en los tiempos de los dos acordes, pronto pasó a ser disco de culto, apenas vendido en los USA y con un relativo éxito en Europa. Tom Verlaine siguió en solitario y recuerdo un buen concierto suyo para «La Edad de Oro».

Con Paul Simon en los camerinos de CBGB

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