Esta va por el Líquido, un garito donde tenías que esquivar las hombreras. Estaba en una de las perpendiculares a Venezuela, quien conozca Vigo sabe que es un buen sitio para un local. Por esa zona pasaron el hortera Oliver, el salsero Malecón, y hasta el jevirulo Faros, con aquella cabina que era medio seiscientos. Cada uno con su estilo y sus tribus. En el Líquido sonaban actuales estos Echo.

Empezaron en el 78 Ian McCulloch, un declarado fan de Morrison y Will Sergeant, un guitarra aficionado a lo orquestal. Tenian también una caja de ritmos llamada Echo. Buscando el mismo sonido estaban con Simple Minds o Psychedelic Furs. Todos a la caza de una receta que los de Liverpool encontraron en The Cutter y repetían en este Silver, single del Ocean Rain, su disco del 84. Una acústica doblada, una sección de cuerda y un riff de teclados, a eso se le añade una voz evocadora, un coro fácil, un solo de sitar en el puente y los toques de violín precisos para volver al tema. «The sky is blue/ My hands untied/ A world that’s true/Through our clean eyes/ Just look at you/ With burning lips/ You’re living proof/ At my fingertips». Las dosis justas de épica que habia destapado el frasco de U2 pero sin tomárselo tan en serio.

El flequillo de McCulloch

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