Que pasa si a este francotirador loco del pop le mandas a una tienda de Tucson? Exactamente lo que dicen la portada y la contraportada de este JR Goes Country, un improbable artefacto del falso ingenuo de Boston. Es del 90 y es su tercer disco de estudio, el segundo para Rounder. Sus ventas siempre llevaron un camino inversamente proporcional al de su acérrimo club de fans y fue casi la última oportunidad de juntar a un montón de músicos alrededor de unas cuantas versiones y algunas originales que Jonathan compone como si fuera un vaquero.
Algo sorprendente con el carácter urbanita y de vecindario que siempre ha cultivado el cara-de-niño Richman. Una visita como la que han hecho casi todos los autores yanquis al género, desde Ray Charles a Lionel Ritchie. Una apuesta arriesgada de la discográfica, no hay un tío más independiente y menos vendedor que Jonathan, pero eso permitió a toda su legión de freakies saborear uno de los pocos discos del bostoniano producidos con algo más que una guitarra, un bajo y percusión. Hay invitados como Tom Brumley, que pone el steel de ese tema como lo hizo toda su vida con Buck Owens en The Buckaroos. El pequeño saltamontes brinca por el rodeo hasta que ella empieza a montar y se pone ciego a juegos de palabras, eso es exactamente lo que hace en este Since You Started….; «Canter and fender, barrel and mane/ Don’t see her much since she started to train/ Cannon bone, knee bone, forearm and arm/ I don’t see her much when she heads for the barn…And no I don’t see her much since she started with horses/ No I don’t see her much since she started to ride». No es un disco redondo, pero sabe salir airoso del reto. Al fin y al cabo un músico de los USA siempre es un poco un músico de country. Aunque eso es lo de menos cuando se habla de Jonathan Richman, un tipo del que emana una especie de luz que atrae a todo tipo de amantes de los insectos.
