Ray Davies siempre hizo lo que le dio la gana. Destrozó las listas con el limpio y urgente riff del You Really Got Me, y pasó a componer canciones casi intimistas, llenas de ironía y con la capacidad de un novelista para agarrar en dos renglones el trasunto de las cosas. Las viñetas de los 60 Sunny Afternoon, Waterloo Sunset, con un poquito mas de riff en la melodía Tired of Waiting of You y directamente extraídas del burlesque, Dandy o Dedicated Follower of Fashion. De la cabeza de Davies salió lo más genuinamente british, exceptuando los Faces, de la escena inglesa de los 60.
Se colocó en el Olimpo y pasó unos cómodos ochenta haciendo megagiras comerciales por los States, donde finalmente logró triunfar en su versión más metalera. Ahí se le perdió la pista. Nos enteramos que habia dado por disueltos a los gastados Kinks en el 1996. Mucho más tarde, en el 2007 y a sus 62 años se fue a Nueva Orleans para grabar este Other People´s Lives, siempre jugando a ser el observador. Y ahí lo volví a escuchar. Después de más de quinientas canciones y cincuenta años de carrera en el pop el chaval del norte de Londres lanzaba su primer disco propiamente en solitario. Un trabajo de cuatro años, donde el bajo lo lleva Norman Watt-Roy, un amigo de lo mejor que se merece por sí solo una entrada. Son canciones sin un hilo argumental, lejos de sus conceptuales Arthur o Village Green. Temas compuestos durante varios años, trabajados y redondos listos para empaquetar con cuatro músicos de confianza. Canciones de peso como And She Wrote, reflexivas o al más puro estilo Blur esta divertida aparición autoparódica que acaba con un consejo, «Well, I’m going down the pub now. You’re welcome to join me if you Like but I know you won’t. You’ve all been watching too much Television. Well I’ll be in the public bar, minding my own business». Mucha clase es lo que tiene el segundo Ray más importante del pop.
