Hay grupos capaces de fabricar canciones redondas y que están siempre en un rincón. Como estos Fountains of Wayne de New Jersey, una de las múltiples joyas que pululan por el enorme pop-rock americano de la Costa Este, dotado de una frescura que le falta a su primo, el británico. El redoble de batería, el bajo y los vientos llenan el depósito del coche alemán de la chica, y la historia entra en velocidad de crucero «Well, she picked me up in a German car And she took me out to an Irish bar Where I drank some beer in a plastic cup ‘Til I had some trouble standing up« . La noche se va liando como cuenta el refrescante video-Sims de ApatheticApparition.  

No sé si es de Fountains o del Cafe du Nord, pero que cartel
«I wondered what I did or said That I might soon regret, it was the night I can’t remember with the girl I can’t forget« y otra vez los vientos para acelerar y parar a la entrada de la siguiente estrofa. Se ha pegado con todos en la primera cita con la chica que no puede olvidar en la noche que no puede recordar. Vaya putada. Pero esto es pop y las revoluciones bajan un poquito para marcar la emoción final, habrá otra cita: «Well, I was back at work at 9:15 when a message popped up on my screen. It said, «Pick me up at 8:45 And we can give it one more try«. Y como en los cuentos de finales felices todos comieron perdices. «And for giving me a second chance I’m forever in her debt. Since the night I can’t remember She’s the girl I will never forget«. Tres minutos y medio justos. Perfecto para empaquetar. Como un Pharmaton Complex, tómate unas dosis diarias de power-pop yanqui para empezar el día con alegría. Como un paquete de cereales. El sol sale para todos y la noche también, pero cada cosa tiene su sitio, el pop dos aceras y esta es la soleada. Let the sunshine in…
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