La otra cara de Nina Simone. Por el blog anda su dulce versión del My Baby Just Cares For Me que le sirvió para volver con gloria en los 80 de su semiexilio londinense. En esta canción muestra el otro lado de su carácter, fuerte y luchador como pocos. Aquí da rienda suelta a la principal lucha de su vida, la segregación racial. Una pianista de su clase, niña prodigio y estudiante de la Julliard School de Nueva York, no fue admitida en la escuela de música de Chicago. Siempre tuvo claro que fue por el color de su piel.
No hay más que ver la rabia que le mete a este Sinnerman para darse cuenta de que hablaba en serio y lo había estado haciendo muchos años. Dejó de estudiar música clásica blanca y se volcó hacia la música negra. Desde el principio, en el 64, muestra su militancia y compusó Mississipi Goddam sobre un atentado en una iglesia negra. Amiga de los Panteras Negras y de Malcolm X se fue convirtiendo en algo muy incómodo en el USA de Nixon. Su carácter inestable y un extraño matrimonio con un ex-policía le juegan malas pasadas y al final decide irse de un país donde se siente boicoteada. Su exilio empezó en el 74 después de un arresto por impago de impuestos y tras pasar por las Barbados y Liberia acabó en una Europa que nunca más dejó. Pasó unos malos años pero nunca le faltaron sitios donde tocar. Y siguió teniendo mal carácter, fue arrestada en el 95 en Francia por zanjar una discusión con sus vecinos a tiros de escopeta. Murió en 2003, casi cuarenta años después de esta maravilla que pusó en Pastel Blues, su disco del 65. «Well I run to the rock, please hide me/ I run to the rock, please hide me/ I run to the rock, please hide me, lord/ All along dem day»
