Johnny Guitar Watson es un personaje de la serie b del funk al que seguía el Jimi Hendrix adolescente. Tengo un disco del guitarrista tejano desde mi quince cumpleaños y rastreo su particular guitarra en todo lo que escucho, aunque lo que me enganchó de verdad fue su vacilón funky. Hace tiempo que descubrí a su padre, T-Bone Walker y me faltaba conocer a su hermano Jimmy Nolen, oriundo de Oklahoma y declarado número 12 en alguna lista de mejores guitarristas del rock.
Los dos le pegan al chicken scratch, pero Nolen siempre prefirió ser musico de un grande como James Brown. Sus únicas grabaciones como solista son del 59 y el 60. Su «hermano» Johnny se reinventó con el funkie y en los 70 se paseaba por las portadas en un Cadillac enorme y cromado de color beis. Sin embargo Jimmy, que después de un motín en la banda de Brown se fue con Maceo Parker, volvió a la reformada banda y siempre fue fiel al Jefe. La historia de las bandas de Brown, son soul en primera persona. Las condiciones draconianas llevaron a la fuga de Nolen, Maceo Parker y Fred Wesley, las tres estrellas: guitarra solista y sección de vientos en el año 1970. No hubo problemas para sustituir a los fugados, pero los sustitutos se fueron apenas un años después con el loco de George Clinton para hacer Parliament. El Padrino del Soul dió marcha atrás y Nolen y sus dos compañeros volvieron, Nolen hasta el final y Parker y Wesley solo unos años más. Cada uno toma las decisiones que su conciencia le dicta y Nolen decidió ser un compañero fiel. Y un guitarrista de cuidado.